Viviendo con intolerancia al gluten en Venezuela
El sábado 17 de noviembre de 2018 fuimos a la 2da Feria Libre de Gluten de la Fundación Celíaca de Venezuela, así que fue la ocasión perfecta para actualizar este artículo de hace dos años.
En 2015 descubrí que soy intolerante al gluten. El gluten es una proteína de origen vegetal, presente en el trigo, la cebada, el centeno y la avena (aunque existe una discusión respecto a esta última). Algunos organismos, como el mío, al no poder digerir esta proteína, emiten una respuesta auto inmune exagerada, destruyendo los métodos de absorción de nutrientes del intestino.
Ya sospechaba que tenía este padecimiento porque cada vez que comía un plato con trigo como ingrediente (sobre todo un plato de pasta), se me hinchaba el abdomen, me despertaba cansada, caía en depresión sin razón aparente, tenía bajos niveles de hemoglobina, en fin, muchas razones para pensarlo.
Por eso me puse a investigar y contacté con el laboratorio Torre Caracas, solicitando un presupuesto para estos exámenes (enviando una orden médica al mail resultados.ltc@gmail.com). Pocos días después me llegó a mi correo un documento con los resultados y efectivamente, la prueba del gluten IgG dio positivo alto.
El primer paso fue reducir de mi dieta todas aquellas cosas que tuvieran trigo, cebada y centeno. Esto para mí fue un poco difícil porque estaba acostumbrada a desayunar y cenar sándwich. Aquí vienen las alternativas que he encontrado hasta ahora si vives en Venezuela.
Alternativas según mi experiencia
Llevar una dieta libre de gluten se hace más o menos fácil al consumir alimentos típicos venezolanos, como arepa (aunque el maíz es libre de gluten, algunas marcas de harina de maíz procesan cerveza de cebada, y existe contaminación cruzada), cachapa (originalmente el maíz pilado no contiene gluten, pero en algunos restaurantes lo mezclan con harina de trigo, contaminándolo), bollitos, empanadas (algunas veces también se mezcla con harina de trigo), casabe, tubérculos como yuca, batata y papa; tajadas, tostones o patacones, etc.
• Sustituí el pan de mis sándwiches por un cuarto de torta de casabe tipo galleta. Un pan de sándwich sin gluten que me encanta es el de Libélulas Bakery, quienes también fabrican pan redondo para hamburguesas. Es delicioso, sobre todo el que contiene huevo. Debe mantenerse refrigerado y la única desventaja es su alto costo. Lo he conseguido en Merei en El Pedregal (también hacen delivery en Caracas), Menos Gluten en Plaza Las Américas y Vía Appia Express en La Castellana.
• Los sándwiches de galletas de arroz inflado también son una buena y económica opción al pan.
• Hace un tiempo encontré unas tortillas de maíz para tacos y flautas sin gluten, hechas en Venezuela, en Excelsior Gama.
• Descubrí la Pasta Oro de harina de maíz en Farmatodo, así como un spaghetti gluten free de marca Sam Mills, y otro de marca Schar, que tienen una textura exactamente igual a la pasta tradicional, y el sabor original. Las marcas que actualmente consumo regularmente son Nnova Rice y La Molisana (siempre verificar los ingredientes en las etiquetas y tablas nutricionales, y que tengan certificado gluten free).
• En internet también hay miles de recetas de “pasta" de calabacín, es supersencilla y con la misma textura de un spaghetti, pero no tan saciante.
• Igualmente, existen unos raviolis deliciosos de marca Miranda sin Gluten.
• La premezcla para tortas y ponquecitos de Juanis es la mejor que he probado hasta ahora para panquecas.
• La harina de cambur verde Harinana también es perfecta para tal fin, y tiene una textura excelente, solo que sabe un poco a platanitos.
• Debes estar consciente de que si tienes algún tipo de sensibilidad al gluten no puedes tomar cerveza. Existen miles de alternativas más de licores, no tan baratas.
• Las galletas sin gluten, sin lactosa y sin azúcar de Sweetest, en sabores chocochispas y mantequilla de maní, son mis opciones de galletas procesadas favoritas, mientras las galletas artesanales que más amo son las proteicas de Margarita's Protein.
• Mis chocolates aptos favoritos del momento son el 70% cacao de Zisnella Chococolates, sin azúcar, sin lactosa, y Chocofit, en cualquiera de sus presentaciones.
• Otros snacks aptos para celíacos son los Aros de yuca y queso que se consiguen también en Farmatodo, maní Happy Mix confitado con maíz, almendras y arándanos deshidratados, los garbanzos tostados de Pod Snacks, las barras proteicas de NuGo (revisa que tengan el sello certificado gluten free), o las galletitas de maíz inflado.
• En la Feria Libre de Gluten compré un brownie de Azalea Foods que estaba delicioso.
• En la Feria también comí unas hamburguesas con pan libre de gluten y chips de batata y plátano, de Cacao Siete (Aeropuerto de Maiquetía) y son muy ricas, sobre todo la que viene con asado negro y queso guayanés.
• Si buscas tequeños sin gluten, en Vibra Verde de Las Mercedes (Tolón Fashion Mall) puedes encontrar opciones listas o para freír, además de un menú de sándwiches y jugos naturales, así como un pequeño market de productos saludables.
• Si buscas un café y pastelería para merendar gluten free y sugar free, o hacer brunch en Caracas (también con sede en Bogotá), recomiendo los menúes de Xocolat and More en Los Palos Grandes, con delivery en Caracas por un costo adicional. Hasta ahora, mis favoritos son el Brownie Snickers con helado de almendras, cake de zanahoria con arequipe (dulce de leche) de almendras, y cake de chocofresa.
• Otro establecimiento que ofrece opciones aptas es Alfresko en la Hacienda La Trinidad.
• Si también padeces de intolerancia a la lactosa, en franquicias de cafeterías como Páramo Café puedes solicitar tu café con leche de coco, almendras, nuez de macadamia o soya, o en Granier con leche de almendras.
• Para recetas sin gluten, sin lactosa y sin azúcar, recomiendo seguir a @lacocinadecarlaymafer, que hacen preparaciones increíbles.
• Carla y Mafer Gamarra también están asociadas con @lacocottedecarlaymafer, una pastelería y panadería de productos sin gluten, con pick-up en Las Mercedes, Caracas, y delivery a toda la ciudad por un costo adicional según tu ubicación. Con ellos encargamos el pan de jamón para Navidad 2023, a base de harina de yuca, harina de almendras y sagú -ideal para nuestra dieta sin cereales, de la que les hablaré más adelante-, y fue realmente perfecto y delicioso. Les adjunto fotos.
• En Nochevieja 2023 tuvimos una torta negra exquisita con chocolate y frutos secos, de 3 porciones, por Doré by Kuchas, keto, sin gluten, sin azúcar y sin lácteos, y de obsequio recibimos un chocolatito negro de Talokohc hecho en Venezuela con pasta de cacao, eritritol y merey. Si estás buscando un postre para celebrar o compartir en una ocasión especial, esta es otra excelente opción.
• Para mantequillas de frutos secos, recomiendo las de Nuthing Better, y Caraque de pistacho.
• No deseches las semillas de auyama o calabaza: déjalas remojando en agua toda la noche, sepáralas de la carnosidad y ponlas a tostar en un sartén con aceite vegetal, un toque de sal y pimienta. Cuando comiencen a saltar, estará listo el snack más económico y sostenible de todos (llevarlas al horno también funciona).
• En la app española de Ekilu encuentras miles de recetas sencillas, bastante económicas, con pocos ingredientes y sin ocupar demasiado tiempo en su preparación. Solo debes filtrar en el buscador lo que tienes en casa o necesitas comprar, y los requerimientos especiales de tu dieta (sin gluten, libre de lactosa, keto, paleo, etc.). La aplicación móvil calcula las raciones automáticamente según el número de personas, y su versión gratis es excelente, con opción a desbloquear más funciones en la versión de premium de pago.
Actualización importante: El peor error de mi vida fue pensar que podría consumir alguna cantidad reducida de gluten, o que, con el tiempo, mi intestino sanaría y se habituaría nuevamente a él y podría volver a consumirlo. Por mucho tiempo, por mi desconocimiento, y el de mi madre nutricionista (ambas celíacas), asumimos que si un alimento con gluten no nos “caía mal”, léase, no nos ocasionaba síntomas inmediatos como hinchazón abdominal, dolor, flatulencias, diarrea o episodios de estreñimiento, no había problema en consumirlo.
Hoy en día entiendo que esta es una enfermedad autoinmune, y que incluso un solo bocado de pan atenta contra mi microbiota, permeabilidad intestinal, mis hormonas, me incluso mis neurotransmisores que se forman en el intestino y son responsables de mi estado de ánimo. No por nada, los organismos internacionales exigen que la carga de gluten (incluso por contaminación cruzada), sea de 20 ppm (partes por millón), 20 miligramos de gluten por kilogramo de producto, mientras la ingesta diaria de gluten no debe sobrepasar los 10 ppm (Para la harina de trigo normal que contiene miles de ppm de gluten, solo se necesita el tamaño de la punta de un bolígrafo para alcanzar el límite diario, mucho menos que “solo un bocado”).
Muy a pesar de que mi mamá nutricionista piense que puede “ocasionalmente comer gluten y no le pasará nada” esta ha sido una dura batalla de mi salud vs. la presión social. Actualmente llevo una dieta libre también de cereales, carbohidratos almidonados, lácteos (leche y queso) y baja en azúcares y procesados, basada en la llamada GAPS (síndrome psico-intestinal), por lo que muchas de los productos que probé anteriormente ya no existen en mi dieta, además de otras restricciones relacionadas a las alergias y a la histamina elevada, lo cual ha mejorado no solo mi bienestar físico, estético, sino también mi respuesta emocional, e incluso pude prescindir de los antidepresivos que me recetaron alguna vez de por vida.
Aunque nunca he asistido a sus consultas, los boletines de NutriWhite me han ayudado mucho a entenderme, así como la investigación de las dietas paleo, cetogénica y sobre la sensibilidad a la insulina.
Lamento si alguna vez fallé en mi labor como divulgadora, y mostré en mis redes sociales, o en este espacio, alimentos con gluten por considerar que “no pasaba nada”, y aún más lamento haberme agredido a mí misma y a mi cuerpo de esa manera. Es mucho lo que me queda por investigar, experimentar y aprender, pero al menos hoy reconozco que existe una alimentación a medida para cada quién, que todos los organismos somos diferentes y cada dieta debe ser personalizada, y en estos casos nunca aplicará el “cheat meal”, siendo este un compromiso para toda la vida con el hogar que habita la persona más importante en mi vida: yo misma.
Esta entrada se actualizará a medida en que vaya conociendo y probando marcas y productos. Además, en mis historias destacadas de Instagram 'She Ate' dejo ideas, recetas y recomendaciones.
También puedes leer: Tortillas de plátano, fáciles y rápidas.
Jessymar Daneau Tovar (@letroupe)
0 Comments