¡Llegó el verano! Sin duda mi época favorita del año. Me encuentro planificando las vacaciones y pensé que podría compartir algunos trucos que he investigado para viajar barato sin sacrificar tu comodidad.

Y es que no todos nacimos para ser mochileros y viajar slow. Tu tiempo es lo más valioso que tienes y lo mejor sería aprovecharlo más eficientemente para disfrutar con el menor esfuerzo posible.

Planificar tus vacaciones con suficiente anticipación te ayudará a encontrar los vuelos más económicos y te dará margen de maniobra para ir comparando los precios más bajos en hospedaje, así como los servicios que ofrece cada uno. Puedes elegir hacerlo manualmente, pero yo te recomiendo greattraveladvisor.com, una web que te ayudará a reservar boletos de avión, hoteles, automóviles, taxis, tours, actividades, cruceros, trenes y autobuses al precio más efectivo. Sus expertos se encargarán de todos los arreglos de viaje y hacen todo lo posible para que tu viaje sea cómodo y memorable. Encontrarás miles de ofertas todos los días, así que te garantizan viajar con clase de forma asequible.

Mejor elige viajar entre semana, los martes y miércoles son los días en que encontrarás mejores precios.

La vida minimalista enseña que vivir con solo necesario es vivir con menos preocupaciones. Si se trata de un viaje corto, con tu maleta de mano es suficiente –así también te ahorras la espera de tu equipaje en la cinta transportadora–. Al llegar a tu destino, puedes caminar fácilmente o tomar el transporte público. Armar y desarmar tu maleta será cuestión de una hora.

Ten lo más claro posible qué harás cada día de tu estadía, de esta forma podrás definir los lugares que quieres visitar, el tiempo que te tomará cada visita, cómo será el traslado o dónde ubicar un medio de transporte.

Si tienes que recorrer distancias largas en transporte público, aprovecha para viajar de noche, e incluso y te ahorrarás una noche de hotel. También intenta que el medio de transporte elegido sea lo más cómodo posible.

Al menos para los primeros días de viaje, arma un menú balanceado desde tu lugar de origen. Al llegar, deberás respetar los horarios de comida, tomar mucha agua y mantener en orden tu rutina diaria.

Puedes escoger entre degustar la gastronomía autóctona del lugar que visites, o ir al supermercado –y si tienes la oportunidad, cocinar tus propios alimentos–. Evita a toda costa picar entre horas, ya que son costos que se convierten en gastos hormiga y también puede ser contraproducente para tu salud.

Antes de viajar, debes notificarlo al banco, para evitar que tu cuenta o tarjetas de crédito sean bloqueadas. Igualmente, lleva copia de tu pasaporte y demás documentos, en caso de que algo malo les pase. También recuerda que es DEMASIADO importante buscar un alojamiento con wi-fi, para poder desactivar tus datos móviles y así evitar los gastos exhorbitantes del roaming internacional.

Espero que te hayan servido estas recomendaciones y que en nuestras vacaciones podamos disfrutar a plenitud de estos tan merecidos días.

Jessymar Daneau Tovar (@letroupe)