¿Alguien recuerda cuando Aishop se llamaba Aïshti? Cuesta creerlo, pero desde que abrieron su primera boutique en el Centro Comercial Sambil en Caracas, hasta hoy, han pasado 18 años. Actualmente tienen presencia en 10 estados del país, con 26 locales.

Visité esta tienda por primera vez hace unos ocho años, cuando recién comencé a tener salidas y ocasiones importantes. Desde entonces, he sido cliente más o menos asidua –como casi todas las venezolanas–, así que me emocioné muchísimo cuando me invitaron a compartir en su último aniversario.

Ya me habían comentado que el evento sería increíble, pero mi mente no pudo imaginar cuánto. Desde que llegué, el ambiente en el Centro San Ignacio estaba on point, saludé a algunos amigos y me dispuse a intercambiar palabras con ellos. Más tarde, Valeria Valle, Mario Aranaga y La Vero Gómez abrieron formalmente la noche, refiriéndose a Aishop como una marca que sigue apostando al país.

Enseguida, una comparsa de danza china comenzó a dar su espectáculo, hermosas bailarinas al ritmo de las castañuelas desfilaron con gracia, mientras malabaristas hacían presencia. De pronto, apareció un dragón llevado sobre el cuerpo de baile, cosa que yo solo había visto en documentales del Año Nuevo Chino, y fue justo cuando el show se tornó más interesante.

En un momento no sabía si ver a los contorsionistas en el techo o al equilibrista sobre una pelota, o al dragón, o a las bailarinas, todo muy al estilo del Cirque Du Soleil. Cerró con un show de fuegos artificiales, definitivamente el mejor performance que he visto este año, cuidado no en mi vida.

Con este eventazo, Aishop se reafirma como una marca que lleva las tendencias internacionales hasta los lugares más remotos del país, acordes a cada temporada y al clima tropical de este país.

Fotos: Guillermo Roquett (@roqphoto)

Jessymar Daneau Tovar (@letroupe)